Género: novela clásica histórica
Autor: Víctor Hugo
Editorial: varias
Sinopsis breve: la gitana Esmeralda es condenada al patíbulo. Quasimodo, campanero de Nuestra Señora, de fuerza hercúlea y horrible fealdad, pero corazón sensible, la salva y le da asilo en la catedral .
Me llama la atención del marketing literario de este libro...: Que fue un boom hace unos años, cuando se quemó la catedral. No es de extrañar, porque el objetivo del autor era concienciar a sus lectores sobre la necesidad de proteger el patrimonio artístico. Además, destaca entre todas las adaptaciones la de Disney, que nada tiene que ver con lo que encontramos aquí.
Mi puntuación para este libro es...
¿Por qué esa puntuación?: Le sobran capítulos enteros, repletos de descripciones innecesarias, conversaciones que no van a ninguna parte, parlamentos interminables de secundarios o intentos de profundizar en personajes que no aportan demasiado a la trama. Esto hace que muchas veces sea aburrido, llegando incluso a cortar escenas emocionantes para meter un capítulo de relleno que se podría solucionar en un par de párrafos sin destrozar el ritmo de esa forma.
Obviando esos capítulos, sin embargo, es una historia que me ha gustado. Todos los personajes tienen algo de odioso: desde la propia Esmeralda con su enamoramiento ciego y apasionado por Febo hasta el diabólico Frollo, pasando por el egoísta Gringoire, el hermano de Frollo, el propio Febo o la horrible vieja que odia a las gitanas. Quasimodo es el único que despierta cierta compasión, la verdad.
Todos los hilos de la trama acaban encajando, a veces demasiado pronto, y todo conduce a un final inevitable y épico con mucha acción y peligro (pero cortado por alguno de esos capítulos innecesarios que ya mencioné).
En definitiva, merece la pena darle una oportunidad, aun con todos esos capítulos innecesarios. Más allá de esos, la historia engancha y resulta emocionante.
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Obviando esos capítulos, sin embargo, es una historia que me ha gustado. Todos los personajes tienen algo de odioso: desde la propia Esmeralda con su enamoramiento ciego y apasionado por Febo hasta el diabólico Frollo, pasando por el egoísta Gringoire, el hermano de Frollo, el propio Febo o la horrible vieja que odia a las gitanas. Quasimodo es el único que despierta cierta compasión, la verdad.
Todos los hilos de la trama acaban encajando, a veces demasiado pronto, y todo conduce a un final inevitable y épico con mucha acción y peligro (pero cortado por alguno de esos capítulos innecesarios que ya mencioné).
En definitiva, merece la pena darle una oportunidad, aun con todos esos capítulos innecesarios. Más allá de esos, la historia engancha y resulta emocionante.
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