Como ya sabéis,
ocho de mis nueve libros son autopublicados en Amazon, donde están todos ellos. No obstante, no tengo mucha relación con otros autores autopublicados porque voy bastante por libre, no hago promoción (confío 100% en el boca oído y en que las recomendaciones de mis lectores me traerán más lectores) ni suelo colaborar con las iniciativas conjuntas que realizan (ni siquiera me entero de ellas hasta que han pasado).
Quizás por eso me ha sorprendido una práctica que, al parecer, es tan común. Os cuento. Estaba yo mirando mis solicitudes de mensajes en facebook cuando me encuentro con uno de un autor que no mencionaré en el que básicamente me decía lo siguiente:
«He visto que tu novela,
Incursores de la noche, está al mismo precio que la mía, así que te propongo
un intercambio: yo me compro tu libro, tú compras el mío y así ambos subimos en el ranking».
No hay emoticono que muestre el careto de desconcierto que se me quedó. Y aquí tenemos al primer tipo de escritor tramposo:
El que intercambia compras de libros con otros escritores
Naturalmente, marqué al tipo como spam porque:
- No soporto la falta de ética, y eso es un engaño al lector que compra los libros que están arriba en el ranking en la falsa creencia de que lo están porque son buenos (y no porque los autores han recurrido a trucos sucios como este).
- Nunca compro libros que no me interesan y, si ese autor tiene que recurrir a estas tonterías, su calidad debe ser bastante cuestionable.
- Incursores de la noche tiene más años que Matusalén, pero aun así es bien capaz de subir en el top de Amazon él solito de vez en cuando y colocarse en el respetable top 10 de novelas románticas de juvenil. Es lo que tienen las recomendaciones de los lectores: cuando les apasiona un libro, siguen diciendo a todo el mundo que lo compre, incluso años después de haberlo leído.
- Quiero que los que compren mi libro se lo lean porque les interesa de verdad, no porque son unos interesados.
No sé hasta que punto esta práctica funciona o no más que para subir un poco el ego del autor durante las escasas 24 horas que aguantaría la subida (aunque, si lo hace con suficientes escritores y se deja una pasta, puede que tenga resultados más a largo plazo). Lo que está claro es que es un engaño que le permite luego fardar de que su libro está o ha estado en el top, además de captar algunos lectores incautos.
La cuestión es que no debe ser el único porque, cuando lo comenté por facebook, mucha gente me dijo que era algo común en el mundillo de los autopublicados y me hablaron de otras prácticas igualmente tramposas como:
Escritores que regalan cheques de Amazon para que compres sus libros
Bueno, al menos los regalan a lectores, o al menos eso quiero creer. Entiendo cuando lo hacen con algunos bloggers o influencers para conseguir una reseña o algo similar, pero dejarse un pastizal en regalar cheques regalo (recordemos que no va a recuperar todo su dinero: Amazon se queda con una parte de las ventas del libro) a cualquiera solo para que lo compren en determinado momento desde distintas cuentas y así poder subir su libro en el top me parece una trampa poco ética también.
Escritores que intercambian valoraciones positivas
Esto sí que lo había visto y me parece otro engaño en toda regla. Además, con el concursito de Amazon este verano lo he encontrado a menudo. Básicamente, lo que hacen es proponer un intercambio de comentarios de cinco estrellas. Se reconocen fácilmente porque no suele ser compra verificada y, si te paras a leer el comentario, muchas veces hasta se nota que no se han leído el libro. Y de nuevo es un engaño, porque algunos lectores incautos se compran el libro al ver que hay muchas valoraciones positivas, cuando en realidad estas son falsas.
Escritores que compran opiniones positivas
Esta es la anterior, pero peor. Aunque parezca mentira, hay empresas y plataformas que venden opiniones positivas y algunos autores hacen uso de ellas para falsear sus estrellitas y tomar el pelo a los compradores. Se reconocen por lo mismo que el anterior, aunque los comentarios son aún más "de copia pega".
Escritores que crean varias cuentas para valorarse positivamente a sí mismos
Lo mismo que los puntos anteriores, pero aún más ridículo. Que lo hagas una vez, vale. Después de todo, igual que lo has escrito, lo has leído, así que es legítimo ponerte 5 estrellas. Pero recurrir a varios perfiles para eso... en fin, solo puedo repetir que es ridículo. Y un engaño.
Escritores que te regalan algo muy caro a cambio de que te compres el libro
Esto también lo he visto alguna vez, básicamente ofrecen un regalo caro (un pack completo de sus otros libros en papel, un mp3 o alguna barbaridad semejante) a cambio de que ciertas personas compren su libro o lo valoren. ¿Qué hace la gente? Pues lo necesario para quedarse con el regalo. Que el libro no le interese o no lo haya leído es lo de menos. Y el libro sube, claro, y los lectores incautos pican el anzuelo.
Escritores que no hacen trampa, pero tienen sus truquitos
Hay otras
prácticas para subir en el ranking o en las valoraciones. A mí me parecen
legítimas y éticas, e incluso, aunque nunca las he usado personalmente, llegué a recomendar algunas de ellas a mis clientes, pero me gustaría hacer mención a ellas para que sepáis lo fácil que resulta conseguir estrellitas. Son, por ejemplo:
- Hacer sorteos entre todos los lectores que valoren el libro. Es una forma de incentivar al lector para que dé la puntuación, pero me parece completamente ética. La clave está en eso, incentivas al lector. A alguien que ha comprado tu libro y lo ha leído. Que normalmente no pone valoraciones, pero que lo hará si le das un empujoncito.
-
Regalar algún extra relacionado con el libro (escenas inéditas...) a los que lo valoren. De nuevo, la ética sigue presente: te incentivan para que pongas la valoración, pero es un regalo sin valor útil cuando no has leído la historia.
Moraleja
Hay que tener cierta
desconfianza cuando estás ante la duda de si comprar o no un libro de Amazon. Si te fías en exceso de la cantidad de puntuaciones de cinco estrellas o del ranking de más vendidos, puedes acabar
picando en el anzuelo de un escritor tramposo.
Olvídate del ranking, como autora y asesora de marketing literario durante dos años, puedo asegurarte que, aunque se use como herramienta para dar a entender que has vendido una barbaridad,
entrar en el top es absurdamente fácil y no requiere una gran cantidad de compradores. Además, un libro que acaba de publicarse y que esté en el top
tampoco te asegura su calidad, solo que el marketing para su lanzamiento ha sido bastante bueno.
Si el libro
lleva un tiempo en el top, o en una posición intermedia de la que no se mueve, es cuando resulta una
apuesta más segura: significa que, pasado el empujón inicial del lanzamiento,
las ventas se sostienen en el tiempo, lo que suele indicar que los lectores lo han ido
recomendando.
En cuanto a las estrellas, en lo que debes fijarte no es en ellas, sino en los
comentarios. Lee lo que ponen. Si hablan maravillas del libro pero
no dicen nada concreto, ni argumentan, y podría ser el comentario de cualquier libro de ese género, mejor
desconfiar. También desconfía de los comentarios supernegativos sin argumentos,
como dije en el artículo La guerra de los escritores, algunos han hecho un arte de atacar a su competencia.
¿Y vosotros? ¿Estabais enterados de estas trampas? ¿Conocéis alguna otra?