Reseñas: cine: Quiero comerme tu pancreas, Un buen año, Merlín el encantador

Un buen año

Género: comedia romántica.
De qué va: un experto en inversiones viaja desde Londres hasta Provenza para vender un pequeño viñedo que ha heredado de un tío al que estuvo muy unido en su niñez, pero las cosas se complican de todas las formas posibles y tiene que alargar su estancia.
A mí me ha parecido: pasable (2/5).
Por qué: No ha acabado de convencerme. El protagonista no me cayó nada bien y las cosas que le pasan no son lo bastante cómicas como para combatir el tedio del resto del guión, que me pareció bastante insípido y predecible. Tampoco es que ninguno de los puntos de tensión tuviera suficiente tensión, los puntos de drama tuvieran suficiente carga dramática... Vamos, que no es una película para el recuerdo.

Merlín el encantador

Género: película de dibujos animados infantil de fantasía.
De qué va: un niño acogido por un señor feudal al que tiene que servir sueña con ser escudero. Cuando su camino se cruza con el de un mago despistado llamado Merlín que decide convertirle en su pupilo, vivirá muchas aventuras que le harán conocer mejor su entorno.
A mí me ha parecido: entretenida (3/5).
Por qué: Es una de esas películas que disfrutas más siendo niño que siendo mayor. Merlín es un personaje muy gracioso, pero Arturo da bastante pena y las aventuras que vive transformado en animal tienen un transfondo de enseñanza a los más pequeños que aburre un poco. El final también me pareció un poco forzado y los dibujos bastante limitados, pero a pesar de todo, en general, es agradable de ver.

Quiero comerme tu pancreas

Género: película de dibujos animados trágica.
De qué va: un solitario estudiante encuentra un diario, "Conviviendo con la Muerte". Pertenece a su compañera de clase, Sakura, a la que le quedan sólo unos meses de vida. El ser el único que conoce su secreto hace que surja una amistad entre ellos muy especial
A mí me ha parecido: memorable (5/5).
Por qué: Es una de esas películas pensadas para hacerte llorar. Yo lo sabía y, aunque estaba prevenida, acabé llorando como una magdalena. La historia es muy bonita, más que hablar sobre la muerte, es un homenaje a la vida en el que un joven aislado comienza a abrirse al mundo. Además, los dibujos me parecieron preciosos, aunque reconozco que en algunos puntos el ritmo empeora y amenaza con hacerse pesada, al final me conmovió mucho.

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