Género: novela contemporánea
Autora: Julia Navarro
Editorial: Plaza y Janés
Sinopsis breve: Thomas Spencer, un canalla sin corazón, nos narra su historia desde su más tierna infancia.
Cuestiones de marketing que me han llamado la atención: libro de autora best-seller española, con todo el bombo y platillo que eso implica. La portada es tan sencilla que llama muchísimo la atención.
Mi puntuación para este libro es...
¿Por qué esa puntuación?: Decir canalla es quedarse corto para describir la autobiografía de este protagonista. Es malvado, y sin razón, desde su más tierna infancia. Me ha costado mucho creerme el personaje precisamente por eso, no entiendo sus motivaciones, ya que haciendo daño a todos cuanto le rodean no consigue nada, al contrario. Pero, reflexionando, tiene un claro problema mental y posiblemente existan muchas personas así. Al final, a quien menos comprendo es a Esther, que a pesar de ser una mujer inteligente permanece a su lado gracias a sus manipulaciones.
En general, hay cosas de las que cuenta que están bien y resultan interesantes, pero a veces comienza a repetirse y llega a cansar con algunos asuntos. Se me ha llegado a hacer pesado en algunos tramos y angustioso en otros por la manera que trata a algunos personajes con los que es imposible no empatizar. El final me gustó bastante, aunque me hubiera gustado que las últimas páginas sobre lo que pasa un año después se alargaran un poco para saber más de los que quedan con hilos sueltos
En definitiva, me gusta haberlo leído, pero la verdad es que no creo que lo relea, ya que es muy largo y en cierto modo Thomas me repele bastante.
Sinopsis breve: Thomas Spencer, un canalla sin corazón, nos narra su historia desde su más tierna infancia.
Cuestiones de marketing que me han llamado la atención: libro de autora best-seller española, con todo el bombo y platillo que eso implica. La portada es tan sencilla que llama muchísimo la atención.
Mi puntuación para este libro es...
En general, hay cosas de las que cuenta que están bien y resultan interesantes, pero a veces comienza a repetirse y llega a cansar con algunos asuntos. Se me ha llegado a hacer pesado en algunos tramos y angustioso en otros por la manera que trata a algunos personajes con los que es imposible no empatizar. El final me gustó bastante, aunque me hubiera gustado que las últimas páginas sobre lo que pasa un año después se alargaran un poco para saber más de los que quedan con hilos sueltos
En definitiva, me gusta haberlo leído, pero la verdad es que no creo que lo relea, ya que es muy largo y en cierto modo Thomas me repele bastante.
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