Autora: Yuu Watase
Género: manga romántico contemporáneo de fantasía
Editorial: Glénat
Sinopsis breve: Mai mete sin querer la palabra Epotrans en su agenda electrónica, y resulta ser una contraseña secreta que trae a un chico de la dimensión electrónica que le concede transformarse en cualquiera de sus contactos de la agenda. Lo usará para conquistar al chico que le gusta.
Cuestiones del marketing que me han llamado la atención: poco que decir, es un tomo muy viejo y no lo conocía antes de encontrarlo de saldo.
¿Por qué esa puntuación?:
Sobre las ilustraciones: Muy de los noventa, un estilo que no me acaba de convencer.
Sobre la historia: La protagonista me resultó estúpida y cargante, sus amigas no me cayeron bien y el chico que le gusta es tan infantil e inocentón que no le aguantaba tampoco. El único que se salvaba era el “genio” Takuma, pero pierde fuelle cuando se empieza a enamorar de ella. La trama es predecible a más no poder: hace todo del revés y cualquier acercamiento implica que uno de los dos se muera de vergüenza y deje de hablar al otro durante días (¿...?). Se veía venir hasta el final, que no podía estar más cogido con pinzas, en especial la reacción de Hiroki cuando se descubre lo de la agenda. Vamos, que no me gustó nada.
Género: manga romántico contemporáneo de fantasía
Editorial: Glénat
Sinopsis breve: Mai mete sin querer la palabra Epotrans en su agenda electrónica, y resulta ser una contraseña secreta que trae a un chico de la dimensión electrónica que le concede transformarse en cualquiera de sus contactos de la agenda. Lo usará para conquistar al chico que le gusta.
Cuestiones del marketing que me han llamado la atención: poco que decir, es un tomo muy viejo y no lo conocía antes de encontrarlo de saldo.
Mi puntuación para este cómic es...
Sobre las ilustraciones: Muy de los noventa, un estilo que no me acaba de convencer.
Sobre la historia: La protagonista me resultó estúpida y cargante, sus amigas no me cayeron bien y el chico que le gusta es tan infantil e inocentón que no le aguantaba tampoco. El único que se salvaba era el “genio” Takuma, pero pierde fuelle cuando se empieza a enamorar de ella. La trama es predecible a más no poder: hace todo del revés y cualquier acercamiento implica que uno de los dos se muera de vergüenza y deje de hablar al otro durante días (¿...?). Se veía venir hasta el final, que no podía estar más cogido con pinzas, en especial la reacción de Hiroki cuando se descubre lo de la agenda. Vamos, que no me gustó nada.
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