Crónica: IV encuentro RA (por la mañana)

Lo reconozco, hice pellas. Pero es que el RA no podía perdérmelo. Además, tuve que madrugar igual ^^. Llegué al hotel donde se celebraba el evento justo a las nueve en punto, pero ya había una cola enorme. Así que aproveché para seguir leyendo el libro tostón que llevaba en el bolso en ese momento y para charlar un ratillo mientras avanzaba la fila. Al fin llegó mi turno, me dieron la acostumbrada bolsa de bienvenida, que iba bien repleta, y esperé un poquillo porque ¡habían perdido mi acreditación! (no es que fuera un drama, pero me empezó a entrar la paranoia...). Pero apareció y, por algún milagro, acabé en segunda fila, casi justo detrás de Jo Beverly.

Como la entrega de acreditaciones iba para rato aproveché para examinar los tres libros (uno muy sugerente) que iban en mi bolsa y la maravillosa montaña de marcapáginas y material promocional (algunos firmados por autoras internacionales) que había de regalo. Imaginad qué momento para una coleccionista de marcapáginas y monerías literarias como yo. ¡Se me caía la baba! Me puse las dos chapitas y probé el delicioso exfoliante labial de Lush (también de regalo) antes de decidir que iba a echarle morro y acercarme a Jo Beverly, que estaba desocupada, para que me firmara antes que nadie (fue una sabia decisión, luego hubo una cola del demonio). Ya puesta, comencé la "caza" de autores y antes de que empezara el acto ya tenía firmados buena parte de los libros que llevaba en mi ya famosa maleta.

((Esta foto me la hice al final de la jornada, pero aquí pega más. Jo Beverly conmigo)).

El encuentro estaba centrado en Las voces de la romántica y el acto de apertura corrió a cargo de Megan Maxwell, la ganadora del premio Aura del año pasado y superventas de romántica a la que todos conoceréis. Por el momento he reseñado en este blog tres libros suyos: Las ranas también se enamoran, Los príncipes azules también destiñen y Te lo dije

 Tras el discurso de Megan, Merche (la organizadora, también autora bajo el seudónimo de Aileen Diolch) sorteó un e-reader de Bq, que eran patrocinadores del evento. A lo largo del encuentro Merche fue haciendo diversos sorteos de libros y material promocional, pero este lo hizo al principio por si alguien se tenía que marchar antes.

Tras esto dio comienzo la primera mesa, La voz en internet, en la que Loli Díaz (Directora de la Revista RománTica’S y administradora de Románticas al Horizonte), Olga Salar (autora, he reseñado sus libros  Melodía inmortal, Romance inmortal y  Un amor inesperado), la editora de Ediciones Kiwi, Noe Casado (autora) e Ilu Vilchez  (Directora de Marketing Online Ediciones B y Editora de B de Books).
Hablaron de la revista RománTica´s y por qué surgió; del premio Kiwi-RA, que quedó desierto porque no les mandaron obras que encajaran en el género pero que recibió libros muy buenos que se publicarán en otros sellos de la editorial; y de cómo han influído las redes y los blogs en el mundo de la novela romántica

Aproveché el descanso para comprar los cuatro libros que llevaba planificados (ya conocéis mi regla de no comprar más de tres libros por cada diez leídos... pues bien, me había reservado para el RA cuatro compras... por cierto, voy a reducir lo de los tres libros a dos, mi lista de pendientes sigue aumentando).

La siguiente mesa, "Nuevas voces: el duro inicio" estaba formada por Laura Nuño, autora que ha triunfado con Mi custodio; Isabel Keats, a la que le costó mucho pero ahora va a ser la primera autora traducida al inglés por Harlequín; Consuelo Olaya (la editora de Versátil) y María José de Jaime (Editora de Libros de Seda). Se habló de la apuesta por las autoras nacionales, las ventajas y razones para dicha apuesta...

Aproveché el descanso para que me firmaran los libros que acababa de comprar. Primer RA del que me voy con todos los libros firmados ^^. 

La mañana finalizó con "La voz de la experiencia", la entrevista a Jo Beverly, que nos habló de su trayectoria, el proceso de documentación, cómo es ser una autora internacional, su aversión a los prólogos...
El jueves que viene os hablaré de cómo fue la tarde, porque esto está quedando demasiado largo.