El otro día estaba leyendo un libro que me indignaba cada vez más. Era, supuestamente, una novela romántica/erótica, pero en realidad a mí me pareció una apología del maltrato y del acoso en toda regla. No sé ni cómo aguanté hasta el final, pero os aseguro que me dieron ganas de quemar el libro. Y puse el siguiente mensaje en facebook:
A ver, lectoras y escritoras de romántica, dejemos algunas cosas claras:
- Si un tío se comunica contigo aunque le hayas dicho que no quieres nada con él, no es romántico, es acoso.
- Si a ese tío le bloqueas en wasap y te manda citas románticas de Orgullo y prejuicio con otro número, no es romántico, es acoso.
- Si a pesar de todo el tipo se presenta en tu casa y te hace un regalo, por muy personal que este sea, no es romántico, es acoso.
- Si controla todos tus movimientos no es romántico, es maltrato.
- Si te castiga de forma sexual cuando haces algo que no le gusta, a pesar de que tú le has dicho que no (por el motivo que sea, en el caso que nos ocupa porque están en un ascensor, por ejemplo) no es romántico, es maltrato.
- Si se enfada porque no aceptas sus regalos y quieres valerte por ti misma o porque has aceptado los de otra persona y no los suyos, no es romántico, es maltrato.
- Si se enfada porque has ido a comer con un amigo y no con él no es romántico, es maltrato.
- Si te ningunea y te trata como un objeto pero está obsesionado con que eres "suya" no es romántico, es maltrato.
Y un largo etcétera más.¿Y a qué viene esto, preguntaréis? Bueno, son afirmaciones obvias, ¿verdad? Entonces, ¿por qué me estoy encontrando todo esto y mucho más en Tiéntame, un libro erótico que además es supuestamente romántico? Y, lo peor de todo, me encuentro reseñas en las que las lectoras dicen que es muy bonito todo. Por favor, ¿nos hemos vuelto locos? ¿Tan normalizado está el acoso y el maltrato que soy la única lectora a la que le está dando repelús toda la maldita historia?
Por supuesto, muchas lectoras coincidieron conmigo en que les había dado repelús y con que estos comportamientos no les gustaban en absoluto pero ¡me topé con otras tantas a las que les había parecido un libro precioso y no veían mal que aparecieran a cada rato este tipo de cosas!
Últimamente, cada vez me encuentro con más burradas de este tipo, tanto en romántica como en (más triste aún, al ser el público más influenciable) novela juvenil. Nos encontramos con protagonistas sin personalidad que acaban a merced de tipos excesivamente dominantes que hacen gestos supuestamente románticos pero que no dejan de ser comportamientos de acosadores encubiertos. Y es que os diré una cosa: un gesto puede ser muy romántico o muy repulsivo según quién lo tenga y en qué circunstancias. Pero lo que es seguro es que, si ese gesto viene precedido de una negativa de la mujer, que ha dejado bien claro al hombre que NO quiere saber nada de él, ¡ese gesto no es romántico, es acoso!
¿En qué momento se ha aceptado que esa estrategia de "tengo detalles bonitos hasta que ella ceda y convierta el «no» en un «sí»" es en realidad algo precioso y romántico? Seamos serios: lo único que diferencia a esos protagonistas de novela de los acosadores de la vida real que dan miedo es, ni más ni menos, que son guapos, populares y ricos. ¿Es que acaso es mejor que te acose un tipo guapo y rico a que te acose uno feo y pobre? No, señores, es lo mismo. Es acoso. Es un hombre que no acepta un "no" por respuesta, un hombre que está obsesionado, un hombre que debería estar metido en alguna institución o, por lo menos, vigilado. ¿Y ese es el ideal romántico de ciertas autoras/lectoras? ¿O simplemente no se han parado a pensar en lo que están escribiendo/leyendo?
Con el tema del maltrato pasa más o menos lo mismo. Estoy harta de encontrarme con escenas de sexo no consentido que se aceptan así como así porque acaban en orgasmo. Pero a ver, seamos serios. Él quiere sexo. Ella ha dicho que no. Él empieza a sobarla (a pesar de que ella ha dicho que no, lo que ya lo convierte en algo no consentido) y las hormonas de ella la dejan sin cerebro. Tenemos escena de sexo salvaje. Y luego todos tan contentos porque ha sido muy intenso. A lo mejor ella se arrepiente pero ¡qué más da, lo ha disfrutado! Es que no se puede resistir a su macho-man particular... ¿...? ¿...? ¿...?
Pero tenemos más, muchas más escenas de maltrato que son mucho más sutiles que el asalto físico. ¿No os cansan esas historias del tipo atormentado que ningunea a la chica, sin la cual afirma no poder vivir? No sé, a mí me suena a la típica historia de maltratador psicológico de manual que crea una dependencia enfermiza en su víctima y la trata fatal, pero aun así ella sigue esforzándose por "estar a la altura". Pero claro, es una novela romántica, el protagonista es guapísimo y tiene un pasado oscuro y ella, a la larga, acabará derribando sus barreras y llegando a su corazón. Luego, cómo no, él se convertirá en un tipo dominante y celoso, pero como tiene un pasado oscuro y la protagonista ha logrado que él reconozca que la quiere, ¿qué más da? Además, le pone tanto cuando se pone celosón y controla todos sus movimientos para protegerla... ¿...? ¿...? ¿...?
Lo que más rabia me da, además de la infinitud de ejemplos que se me ocurren cuando me he puesto a escribir este artículo (que como empiece no acabamos) es que muchas veces las lectoras justifican a la protagonista con un "es que sí, él es muy dominante, pero ella le planta cara". Y sí, de boquilla le planta cara, pero luego se pliega a lo que él quiere. Lo cual hace que su "rebelión" no tenga sentido. Y nuevamente lo repito, eso no deja de ser el perfil de una mujer maltratada y dominada por su pareja.
Para mí, lo peor es que cada vez me encuentro con más historias así. Parece más cómodo copiar este tipo de estructuras que crear una pareja sana y en igualdad de condiciones, y, como funciona, ¿qué importa que se estén normalizando comportamientos repulsivos? Así que hago un llamamiento a los escritores, y a los editores, para que piensen un poquito antes de publicar ciertas barbaridades. Y a los lectores, para que reflexionen un poco sobre lo que están leyendo y hagan reflexionar a los demás también. Quizás así, entre todos, logremos frenar esta involución de la novela romántica y volvamos a tener más historias de calidad, con finales que no sean "y vivió feliz para siempre con su acosador y maltratador".
Hola Deborah!!
ResponderEliminarMuy buen planteamiento, es que al parecer este tipo de situaciones es lo que atrapa mas, tiene mas adrenalina y mas conflicto. A mi la verdad que no me van, estoy en una etapa de que quiero historias que me dejen algo positivo por mas que sean dramas, pero que valgan la pena, sufrir por puro gusto la verdad que ya no me va, Me quedo con las clásicas novelas románticas e históricas que tanto me gustan. Por cierto de estas nuevas sagas me llama Calendar Girl aunque obviamente es mas de lo mismo, si llegas a sufrir con ella me avisas y veo si encuentro un momento para torturarme también xD!!
Besos.
No quiero saber nada de Calendar girl, me huele a libro malo con mucho marketing y poco sentido común XD
EliminarTienes muchisima razon. Cuando leo historias de este tipo se me ponen los pelos de punta y me pillo unos cabreos muy importantes. El NO significa NO.
ResponderEliminarSaludos
Este tipo de libros, también me dan repelús. De hecho, dan ganas de decirles a las lectoras "ey, tranquila, no te maltrata o te acecha. Solo es romántico y muy bonito".
ResponderEliminarNo entienden la diferencia. Y lo malo, es que la gente piensa, claro, que a dicha persona le van esas cosas.
pero es más, esta serie de situaciones, se ven en las noticias, en la calle, en tus amigos... ¿por qué no son capaces de darse cuenta cuando lo leen?
Creía que era la única que pensaba así...Estoy totalmente de acuerdo con todo lo que dices. Y lo malo es que cada vez hay más de esas...
ResponderEliminarHola, pues yo también lo veo en muchas novelas y cada vez me cansa más, sobre todo que una autora o un autor de hoy en día las escriba. Las de hace veinte años, pues mira, antes había menos concienciación, pero hoy en día, joder, romper ya con el círculo, que además es aburrido y repetitivo, por lo menos para mí. Hay interés en novelas igualitarias, búscalo en otra parte, pueden ser atrapantes, geniales, enganchar y vender un montón, vale ya de repetir modelos porque es más fácil de escribir con un patrón ya hecho.
ResponderEliminarYo cada vez soy más exigente, aunque muchas veces paso porque me cuesta encontrar una que esté bastante concienciada, y soy más permisiva en novelas históricas románticas, también depende del grado de veracidad de cada una pero estoy a favor de que se pueda suavizar ese apego a la realidad para conseguir una novela que no sea tan asquerosamente machista. Hay cada una que... En fin, entiendo tu hastío, a ver si con el tiempo esto va cambiando.
¡Saludos!
Las cosas que dices aquí, no son para poner en un blog de libros, ¡es para decirlo en los institutos!, ¡¡en los barrios!!, ¡¡¡en la tele a las nueve de la noche!!!
ResponderEliminarPara que las mujeres se enteren, de una vez, de lo que es una relación abusiva. Porque para cuando llega el primer guantazo, ya te ha controlado psicológicamente.
Hablando ya de romántica, en concreto, hay que reconocer que este tipo de "protagonista" (me niego a llamarlo héroe) era muy habitual en la romántica de los setenta-ochenta. Luego desapareció.
Al parecer, el abusador-controlador-maltratador (psicológico o físico) ha vuelto a asomar su perversa cabecita en subgéneros como la erótica, lo paranormal y el NA (y no pongo ejemplos).
Afortunadamente, son bastante difíciles de encontrar, hoy en día, en històrica o contemporánea.
Mi consejo: leer a las autoras grandes que no proponen protagonistas así. Nora Roberts, SEP, Jennifer Crusie, Kleypas, Meredith Duran, Courtney Milan, Cecilia Grant... Las principales novelistas románticas están muy lejos de tipos y escenas como los que se describen aquí.
Todo es saber encontrar romántica de calidad que no insulta la inteligencia y la sensibilidad feminista del lector.
Lo dicho: muy buen post, pero por desgracia, no es algo sólo de ciertas novelas romanticas, sino de nuestra sociedad.
Como yo digo, se puede ser muy machote sin necesidad de ser un machista.
@galena Las de hace veinte años mostraban comportamientos así, cierto, pero eran más difíciles de detectar, quizás porque en esa época estaban más integrados, quizás porque las autoras tenían un poco de cabeza... Algunas de las que se escriben hoy en día son tan extremas y muestran machismos, maltratos y acosos de un modo tan descarado que es sorprendente que se hayan llegado a publicar.
ResponderEliminar@bona Me encantan esas autoras (a un par no las conocía, pero me las apunto), aunque no las leo tanto por un detalle: son extranjeras y de las grandes. Generalmente prefiero apostar por las autoras locales, no solo porque a muchas las conozco, sino porque el mercado español es más difícil y las autoras de aquí necesitan más apoyo para recibir una retribución digna de lo que escriben. Cuando una hace este tipo de apuestas se complica la cosa. La cuestión es que esas autoras grandes son profesionales que saben perfectamente qué escribir y tienen sus filtros: editores y agentes con cabeza, cosa que parece empezar a escasear en este país, donde publican cualquier cosa "vendible" sin pensar en las posibles barbaridades que pueda haber en el contenido. El gran problema viene cuando las lectoras que dan su opinión, que deberían ser otro filtro, lo leen también sin percatarse de lo que pasa y no "avisan" al resto sobre el libro, ¡sino que para colmo lo recomiendan!
¡Ah, pues entonces en eso ya no puedo ayudar! Porque la novela romántica escrita en español, salvo excepciones, no es lo mío. Y mira, puede que con esto que has escrito, me estés descubriendo una razón de por qué no encuentro novela romántica en español que me guste, cuando otra ficción comercial hispana (histórica, o novela negra, p.e.) me convence de sobra.
EliminarHay de todo, claro. Autoras buenas de verdad (como Noelia Amarillo...) y autoras mediocres, o directamente malas, que han tenido mucha suerte y saturan las librerías. Yo misma soy autora de romántica y mi editor y yo discutimos casi cada línea para que salga una obra digna y el lector sienta que le respetamos, no que le tomamos el pelo. No sabes cuánto me fastidia pasarme años trabajando en una novela en solitario, luego meses trabajándola con el editor... y, cuando voy a una presentación de novela romántica, encontrarme con la típica autora que dice, encantada de la vida: "no, si no tardé casi en escribirla y, cuando la mandé, apenas una semana después, estaba en imprenta". Vamos, que el editor no ha hecho de filtro ni ha hecho nada. Por no hacer, ni ha corregido la novela. Pero saca una tirada gigante con una campaña de marketing bestial con la que no se puede competir, prácticamente la impone en todas las librerías y mientras, mi novela bien trabajada acaba en un rincón, si es que se muestra en tienda. Lo mismo pasa con la formación: yo me he hecho no sé ya cuantos cursos de literatura, escritura, lingüística, corrección, psicología... para que cada libro que sale sea mejor que el anterior. Ciertas autoras de aquí (que venden como churros) creen que no les hace falta mejorar y la consecuencia es obvia: escriben cualquier cosa de cualquier manera, y ahí empiezan los problemas. Porque si escribes cualquier cosa, sin pensar más que en la fecha de entrega porque tienes que escribir x libros al año y no se te ocurre nada, pueden salir cosas tan brutas como un protagonista masculino que parece sacado de una peli de mujeres acosadas de la sobremesa de antena 3, con la protagonista pensando que es superromántico que él la controle.
EliminarLa ficción es lo que tiene. Si fuese real no me gustaría. El libro me gusta. Lo siento es lo que pienso. También me gusta grey entre otros. Y otros libros que no. Etc siendo ficción me molan. Siendo realidad no.
ResponderEliminarTambién me gustan muchas veces los asesinos de los libros y no por eso soy una persona psicópata.
Besos guapa.
A ver, si me parece bien que se lean esos libros y hasta que se disfruten. Si están bien escritos, yo también los disfruto. El problema es cuando se catalogan de romántica y a nadie se le ocurre comentar, cuando hablan del libro, que hay maltrato y acoso en él, tanto más si no lo comenta porque ni se da cuenta. Están normalizando algo que no debería normalizarse, lo que hace que la sociedad cada vez lo vea como el estándar.
EliminarMucha gente, como tú, Ester, entiende que es una ficción... pero mucha otra no lo asimila de esa manera y convierte eso en lo ideal. O, si sufre a un tío así en su vida, lee el libro y piensa: "Ah, vale, será lo normal". Ahí está la trampa... Que lo llamen literatura, pero que no lo llamen literatura romántica. Etiquetándolo así, solo se pervierte un género. ¡Romántica no puede ser igual a relación tóxica!
Ya sabemos que en esto de la literatura también mandan las modas. Por lo que tengo entendido, 50 sombras ha creado tendencia con un concepto bastante erróneo sobre la dominación/sumisión, resumiéndolo a lo que comentas: acoso y maltrato.
ResponderEliminarTampoco puedo opinar demasiado porque es un género que no suelo leer, pero pienso que llevas razón, que el papel del chico malo lo están llevando demasiado lejos y que están creando un concepto de mujer sumisa que flaco favor nos hace.
Como todas las modas, pasará, o eso espero.
Es muy triste que se escriban novelas así y que, además, ¡hay lectoras que adoran esa clase de historias! Yo solo veo maltrato e, incluso, violaciones, ¿cómo se puede desear algo así? Yo tampoco lo entiendo.....
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