Género: novelas de fantasía infantiles
Autor: Brandon Sanderson
Editorial: B de Blok
Sinopsis breve: Alcatraz tiene un problema: tiene tendencia a romper cosas de forma desastrosa. En su decimotercer cumpleaños, recibe una bolsa de arena, herencia de su padre. A partir de entonces, conocerá a su familia y se unirá a la lucha contra los bibliotecarios malvados.
Mi puntuación para este libro es...
Por qué: Lo que tienen en común los libros de esta serie es una ingente cantidad de elementos transgresores tanto a nivel narrativo como a nivel argumental, así como un toque de humor fantástico muy loco.
Hay un juego metaliterario que empieza por la propia biografía del autor y pasa por las ilustraciones o el propio narrador saltándose continuamente la cuarta pared, contando por qué elige ciertos elementos narrativos o haciendo cosas raras en las últimas páginas para los lectores que tienen tendencia a leerlas antes de tiempo.
Los personajes también son únicos, ya que los Smedy tienen talentos únicos que parecerían todo lo contrario: romper cosas, llegar tarde, perderse, tropezar... Así, le dan la vuelta a la idea de héroe, ya que esas habilidades absurdas son las que muchas veces hacen avanzar la trama, lo que invita a los jóvenes lectores a sacar partido de sus defectos.
También se da la vuelta a muchas otras cosas, ya que rompen con las ideas preconcebidas. Los cristales hacen cosas mágicas, los bibliotecarios son malvados, las espadas son más avanzadas que las pistolas... el lector tiene que cuestionarlo todo, incluyendo al propio narrador.
En el primer libro, “Alcatraz contra los Bibliotecarios Malvados”, conocemos al personaje principal y a su abuelo, así como a otros miembros de su familia y a Bastille, una chica de la edad de Alcatraz que es toda una guerrera. Deberán infiltrarse en una sede de los bibliotecarios para recuperar la herencia del joven, toda una aventura para la que un chico que se ha criado en las Tierras Silenciadas (nuestro mundo) no está preparado.
El segundo libro, “Los huesos del escriba”, también tiene una estructura parecida, ya que esta vez deben infiltrarse en la Biblioteca de Alejandría, que es un escenario muy distinto. Además, hay nuevos miembros en el equipo con otros talentos, y los enemigos son otra secta de bibliotecarios muy diferente, ya que la componen muertos vivientes. Aquí seguimos descubriendo más información de este mundo tan especial sin que se pierda ese toque caótico y humorístico tan característico que me gusta mucho y que invita a querer seguir leyendo los siguientes.
Hay un juego metaliterario que empieza por la propia biografía del autor y pasa por las ilustraciones o el propio narrador saltándose continuamente la cuarta pared, contando por qué elige ciertos elementos narrativos o haciendo cosas raras en las últimas páginas para los lectores que tienen tendencia a leerlas antes de tiempo.
Los personajes también son únicos, ya que los Smedy tienen talentos únicos que parecerían todo lo contrario: romper cosas, llegar tarde, perderse, tropezar... Así, le dan la vuelta a la idea de héroe, ya que esas habilidades absurdas son las que muchas veces hacen avanzar la trama, lo que invita a los jóvenes lectores a sacar partido de sus defectos.
También se da la vuelta a muchas otras cosas, ya que rompen con las ideas preconcebidas. Los cristales hacen cosas mágicas, los bibliotecarios son malvados, las espadas son más avanzadas que las pistolas... el lector tiene que cuestionarlo todo, incluyendo al propio narrador.
En el primer libro, “Alcatraz contra los Bibliotecarios Malvados”, conocemos al personaje principal y a su abuelo, así como a otros miembros de su familia y a Bastille, una chica de la edad de Alcatraz que es toda una guerrera. Deberán infiltrarse en una sede de los bibliotecarios para recuperar la herencia del joven, toda una aventura para la que un chico que se ha criado en las Tierras Silenciadas (nuestro mundo) no está preparado.
El segundo libro, “Los huesos del escriba”, también tiene una estructura parecida, ya que esta vez deben infiltrarse en la Biblioteca de Alejandría, que es un escenario muy distinto. Además, hay nuevos miembros en el equipo con otros talentos, y los enemigos son otra secta de bibliotecarios muy diferente, ya que la componen muertos vivientes. Aquí seguimos descubriendo más información de este mundo tan especial sin que se pierda ese toque caótico y humorístico tan característico que me gusta mucho y que invita a querer seguir leyendo los siguientes.
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