Autor: Javier Torras de Ugarte
Editorial: Ediciones B
Sinopsis breve: Irene, una ateniense de gran belleza, pero pobre, ha sido elegida para desposarse con el hijo del Emperador de Bizancio. Viajará entonces a Constantinopla, un entorno distinto al que conoce, donde deberá buscar aliados para hacer frente a las intrigas de palacio.
Mi puntuación para este libro es...
¿Por qué esa puntuación?: De Irene de Atenas, aunque estuvo en el poder varias décadas, solo se comenta la barbaridad que hizo para mantenerse en el poder y como mucho el tema de los iconos. Pero tuvo que ser extraordinaria y la novela se basa en los hechos conocidos para desarrollar historia creíble y muy amena.
Conocemos la trayectoria de ascenso al poder de Irene y su gran evolución: tuvo que tomar decisiones difíciles y mover muy bien sus fichas para ganar apoyos y convencer a todos de que tomaran decisiones sin que supieran que la idea era suya. Vemos su determinación, pero también su progresivo cansancio cuando pierde a gente importante y se ve obligada a jugar la partida de poder contra su propio hijo, que era un Emperador nefasto.
Además de la parte de las intrigas de palacio y de Irene, tenemos las subtramas de Herón y Zoe, que se mueven por distintas localizaciones, lo que nos permite conocer más culturas aparte de la bizantina y encontrar el punto de aventura y movimiento que no se puede encontrar en el palacio. Hay un toque de fantasía que me sobró un poco, pero por lo demás estas partes son emocionantes.
Las ambientaciones están muy logradas y otro detalle del libro es que se intercalan también cuentos tradicionales y mitos, que narran los propios personajes. Con todo, consigues meterte en la historia y disfrutarla mucho, así que mi valoración es muy positiva.
Conocemos la trayectoria de ascenso al poder de Irene y su gran evolución: tuvo que tomar decisiones difíciles y mover muy bien sus fichas para ganar apoyos y convencer a todos de que tomaran decisiones sin que supieran que la idea era suya. Vemos su determinación, pero también su progresivo cansancio cuando pierde a gente importante y se ve obligada a jugar la partida de poder contra su propio hijo, que era un Emperador nefasto.
Además de la parte de las intrigas de palacio y de Irene, tenemos las subtramas de Herón y Zoe, que se mueven por distintas localizaciones, lo que nos permite conocer más culturas aparte de la bizantina y encontrar el punto de aventura y movimiento que no se puede encontrar en el palacio. Hay un toque de fantasía que me sobró un poco, pero por lo demás estas partes son emocionantes.
Las ambientaciones están muy logradas y otro detalle del libro es que se intercalan también cuentos tradicionales y mitos, que narran los propios personajes. Con todo, consigues meterte en la historia y disfrutarla mucho, así que mi valoración es muy positiva.
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