Presentación de Neimhaim. Los hijos de la nieve y la tormenta

No iba a ir a más presentaciones esa semana, no. Tenía un montón de trabajo acumulado pero fue llegar de la presentación de Los albores del miedo y encontrarme con que, al día siguiente, se presentaba un libro con muy buena pinta... ¡y en la presentación habría figuración vikinga y escocesa! ¿Cómo iba a perdérmelo yo, una apasionada de esas culturas?

Como siempre, directa del trabajo, llegué bastante justa de tiempo. Había música celta en directo en la puerta (¡empezaba bien!) y la música siguió mientras subíamos en procesión a la planta donde se hacía la presentación. Me tocó quedarme de pie al fondo, porque estaba petado de gente, pero bueno, al menos conseguí colarme entre la gente hasta un sitio donde se podía ver algo (aunque las fotos que saqué salieron fatal). 

Se tocó algún temita más antes de que empezara la presentación en sí, que contaba con la presencia de Javier Negrete (otra sorpresa: uno de mis escritores favoritos), la editora y la autora, por supuesto. El libro vino de un sueño que tuvo cuando tenía 18 años y hasta los 33 no acabó de escribirlo. Se inspiró mucho en la mitología nórdica para crearlo (su afición por ella viene del mundo del cómic) y en principio no tenía pretensiones de publicarlo, pero al final se animó y acabó con Fantacsy, que apuesta por los autores españoles de fantasía. Inicialmente se autocensuró con el sexo, pero sus lectores cero le hicieron rectificar, y como también tenía que acortar (nunca ha tenido problemas de hoja en blanco, sino todo lo contrario) quitó escenas que había escrito a posteriori, que se ofrecen al lector como material inédito. El libro acaba, aunque su intención es que sean cinco, uno por cada generación de los primeros cien años de reinado de una familia, por lo que dejó una pequeña puerta abierta.

Cuando acabó la presentación en sí, la autora se fue a firmar a un lateral. Por desgracia yo ya había fundido mi presupuesto para libros en la Feria del libro de Madrid y no me quedaba ni la reserva de emergencia, así que no lo tengo firmado pero ¡no os preocupéis!, habrá reseña este mismo lunes porque la editorial aceptó mandarme un ejemplar... y ya me lo firmará en alguna feria ^^.
El caso es que, aunque me quedé sin firma, continuó el espectáculo. Primero se puso en escena la vestimenta y las armas de los vikingos, que no es como sale en las películas. Inicialmente tenían solo un arma que usaban para cazar y, conforme iban guerreando y acumulando ganancias, adquirían artículos que les ofrecían mayor protección.

Después nos mostraron cómo se pone y se usa el kilt escocés (¡hay que ver lo que da de sí esa tela, vale para todo!) y hubo algo más de música pero, como ya he dicho antes, tenía un montón de trabajo, por no hablar de que al día siguiente madrugaba, así que no me quedé mucho más (aunque me hubiera gustado).

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